La experiencia de rodar un curso
Por Saâd Jebbour Da igual que sea un cortometraje, un largo, un documental o un videoclip; la experiencia de “rodar” siempre es única y gratificante. Los días de rodaje suelen ser largos y agotadores, tienes que hacer frente a muchas pruebas y luchar para que el proyecto quede lo mejor posible; porque todos estamos acostumbrados a ver productos audiovisuales de calidad, y si notamos el mínimo fallo la sensación es desagradable; por esto la experiencia de rodar es toda una prueba, hay que conseguir el mejor producto audiovisual posible. Pero es gratificante ver la obra acabada y darse cuenta de que todos los esfuerzos han sido necesarios. La sensación es la misma cuando se graba un videocurso, pero tiene sus peculiaridades; la más notable de ellas es que la estrella suele ser una sola persona, así que toda la atención está focalizada en el profesor. Cada día pasado con ellos es algo memorable, más allá de aprender el contenido (tanto en la grabación como la edición del curso) conoces más de cerca al profesor, almuerzas con él, trabajáis juntos, etc
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